La Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui de Esquivias vende este libro donado por el autor para la causa Saharaui

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jueves, 4 de febrero de 2010

¿Por qué tu miedo madre?

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¿Por qué tu miedo madre? es el poema con el que el mexicano Leopoldo Ayala contribuyó al libro ¡Saharaui! 22 poetas en pié!



¿Por qué tu miedo madre?
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¿Por qué tu miedo madre?
Si le diste tu leche que tomaste del desierto
y con la patria firme entre tus brazos
lograste que te sonriera de pié
 la primera vez que la arena besó
sus sesenta y cinco centímetros.

Si en cada parte de la mesa
imaginada en la duna
reuniste lo beduí del padre
y bocado a bocado, primero pequeño
después en asombro
supo del calor de sus palabras
y la fuerza de sus dedos.

Si tu misma llevaste la mano que escribió
muy apretada cada letra del alhuruf
con las que se dice L-i-b-e-r-t-a-d.

¿Por qué tu miedo madre?
si cuando su tamaño creció mas que el rifle
largamente colgado a un lado de la haima
tú lo bajaste para que lo abrazara.
Tú hilaste el elzán negro con el que hoy
se cubre el rostro,
cuando se quitó su nombre
y se puso el de todos.

Y el camello que monta es el mismo de su hermano,
hijo del camello
sobre el que mataron
al soldado del Ejércitode Liberación Popular...
¡su padre!
Y su primer disparo fue para salvarte a tí
de la brutalidad marroquí alistada en dólares
napalm, fósforo blanco, bombas de fragmentación
ahora también en franco francés.

¿Por qué tu miedo madre?
Si su lucha saharaui es la nuestra
la de los pueblos nuevos.
Si tú, madre polisaria
eres madre en america
y madre mexicana.

¡Que no haya miedo en las dunas de tú corazón!
"Toda la patria o el martirio".
Madre, nunca dejes de llevarle la mano.
Que no de je de escribir
redonda, sonora, detonante, completa,
la palabra ¡¡¡Libertad!!!



Esas bombas de racimo que los masacraron en su huida de los aviones marroquíes, salieron de las fábricas españolas, como siguen saliendo todavía hoy, pagadas con el dinero que España y la UE le regalan al asesino usurpador que pisotea los derechos humanos en el Sahara Occidental.

Esas bombas de Napalm y Fósforo Blanco que les hacía arder como antorchas vivientes en medio del desierto sin un lugar donde guarecerse del ataque de los aviones marroquíes, salieron de las fábricas francesas, americanas... ¡que se yo! de cualquier país de esos que dicen que defienden los derechos humanos, pero que aún siguen proporcionando su material de muerte al asesino usurpador.



4 comentarios:

Anónimo dijo...

Precioso poema, Juan Francisco!

¿Cómo no va a sentir miedo una madre ? esa mujer que lo ha dado todo por su hijo y no entenderá por qué tiene que dar su vida por el pueblo, por qué no pueden disfrutar ellas de sus hijos, de sus nietos, por qué no pueden tener una vida aparentemente normal ... muchas preguntas .... una madre no puede entender por qué a ella le tiene que estar pasando eso ...

Gracias por seguir denunciando tanta injusticia... quizás algún día sirva para algo...

Un abrazo

Sandra Figueroa dijo...

Francisco es hermoso el poema pero triste por las imagenes que al leer estremecen a mi alma. Hay tanta injusticia en el mundo que mi alma que solo esta soñando se asusta................Besos, cuidate amigo.

Juan Francisco dijo...

Hola Gara. Hasta ayer, se cometió una enorme. En la UE se iba a revisar el acuerdo de pesca con Marruecos y ayer se presentaba un informe serio que presentaba una comisión de la propia UE para debatir ese acuerdo, pues legalmente no se puede usar sin el permiso de losd saharauis segun los acuerdos de la ONU. Pues la presidenta de la cámara retiro del orden del día la presentación y debate de dicho informe. Veremos que pasa. Es otra jugada mas del sinvergüenza de Rodrígez Zapatero. Un amrazo amiga mía y buen fin de semana.

Juan Francisco dijo...

Hola Sandra, casi escribimos los dos al mismo tiempo. Es verdad que son imágenes tristes como todas aquellas que reflejan la opresión y el despotismo de un pueblo, pero son las que hay. Un abrazo Sandra y buen fin de semana. (Estoy escribiendo temprano, porque me voy a mí pueblo extremeño a pasar el fin de semana)